Con arándanos a la mano podrá hacer magia cada día. Los frescos se conservan en la heladera hasta diez días, y se puede congelar fácilmente antes de lavar. Aquí están agunas ideas sencillas y elegantes:
Agregue a una ensalada de frutas para un toque de color, nutrición, y elegancia. Pon una hoja de menta para un toque especial.
Licue arándanos con bananas, leche o yogurt, y hielo para preparar un licuado morado y nutritivo.
Para darse un gusto bajo en calorías, prepare gelatina de limón con arándanos. Enfrié la gelatina para prepárala, y disfrútelo.
Cubra una bola de helado con arándanos frescos o descongeladas.
Agrega una taza de arándanos a una masa de torta de vanilla.
Sirve enrollados en panqueques con una salsa de fruta de bosques.
Cubra sus helados, yogures, o arroz con leche con arándanos frescos o congelados.
Agregue a una ensalada de frutas para un toque de color, nutrición, y elegancia. Pon una hoja de menta para un toque especial.
Licue arándanos con bananas, leche o yogurt, y hielo para preparar un licuado morado y nutritivo.
Para darse un gusto bajo en calorías, prepare gelatina de limón con arándanos. Enfrié la gelatina para prepárala, y disfrútelo.
Cubra una bola de helado con arándanos frescos o descongeladas.
Agrega una taza de arándanos a una masa de torta de vanilla.
Sirve enrollados en panqueques con una salsa de fruta de bosques.
Cubra sus helados, yogures, o arroz con leche con arándanos frescos o congelados.
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